Queremos que nuestros productos ofrezcan equilibrio entre sabor y la correcta nutrición.

Por ello los desarrollamos procurando bajos niveles de sal y grasas*, según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.

* Grasas trans: Producidas por la hidrogenación de los aceites vegetales. Están presentes de forma natural en algunos productos, aunque la mayoría proviene del procesado de los alimentos. Su ingesta aumenta los niveles de colesterol malo en la sangre.

Grasas Saturadas: Requieren una alta temperatura para su fusión, por lo que son difíciles de disolver y absorber por el organismo. Tienden a incrementar el colesterol. Están presentes en alimentos como la carne y los lácteos.